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"En la tesis doctoral de Dr Wolter Seuntjens “Sobre bostezar” aprobada en Octubre de 2004 en la Universisad Vritje de Amsterdam, defiende la hipótesis de que existe una relación entre el sexo y el bostezo, afirmando que bostezar tiene un lado erótico.
Y aporta una revisión de numerosos campos que aportan pruebas en este sentido:
En Lengua y literatura
Algunos proverbios y expresiones el bostezo contagioso puede significar además de empatía, enamoramiento.
Haz la prueba de bostezar con tu grupo de amigos y amigas, pero te expones a que sea tu mejor amigo el que empática o enamoradamente sufra el contagio.
El bostezo, por sí mismo, puede significar no sólo aburrimiento, sino también lujuria y pasión, e incluso está asociado al cortejo.
Psiconálisis
Los pocos que han dedicado su atención al asunto lo consideran un signo sexual latente.
Estudios con primates se ha encontrado una relación entre el número de bostezos y la jeraquía o estatus del primate en cuestión, así como entre el bostezo y el nivel de testosterona.
Muy bien, el que más bosteza es el más machote, de paso escupe al suelo y se rásca los huevos para demostrarlo.
Fisiología
En el campo de la anatomía y la fisiología, se ha descrito el bostezo como un mini-orgasmo.
Patología
En el caso de pacientes terminales de rabia, la eyaculación y el bostezo son síntomas que van juntos.
FARMACOLOGÍA
En el campo farmacológico, se ha encontrado una conexión entre el bostezo y el orgasmo espontáneo en casos de abandono de las drogas por heroinómanos.
El bostezo y la respuesta sexual también están asociados como efectos secundarios al tomar algunos antidepresivos. Incluso en un experimento de 1983 un grupo de doctores consiguieron probar la relación al hacer que el bostezo provocase una eyaculación con orgasmo.
Conclusiones del científico
Para terminar, el gran Wolter Seuntjens dice que las dos principales conclusiones a las que ha llegado son que:
1- el bostezo, al contrario de lo que se piensa, no es algo trivial, sino un comportamiento extremadamente complejo.
2- el bostezo parece tener un lado erótico, un aspecto sexual.
Por lo que sigue siendo uno de los misterios de nuestra vida el comportamiento contagioso del bostezo .
Y es que la naturaleza misteriosa del bostezo resulta tan cautivante, que como lees han desarrollado muchas teorías al respecto. Muchas de ellas incluso han sido financiadas por proyectos de investigación gubernamental. En el año 2005, un estudio sobre el cerebro del gobierno finlandés, confirmó que el contagio del bostezo es en gran medida inconsciente. Este nuevo estudio fue también el primero en reconocer un signo neurofisiológico del contagio del bostezo: la desactivación de una parte del hemisferio izquierdo del cerebro.
Esta zona del cerebro ha sido relacionada con el análisis de las expresiones faciales inconscientes. De cualquier manera, los investigadores son los primeros en afirmar que estos descubrimientos aún no son lo suficientemente claros en la actualidad.
Otras teorías que se han planteado son las siguientes: La teoría fisiológica – De acuerdo con esta escuela de pensamiento, nuestros cuerpos nos inducen al bostezo para obtener más oxígeno o para eliminar un exceso de dióxido de carbono. Esta teoría se sostiene para explicar por qué la gente bosteza en grupos. Sin embargo, la misma teoría se derrumba cuando nos damos cuenta de que las personas no bostezan al realizar ejercicios físicos.
La teoría de Boredom –
Aunque habitualmente bostezamos cuando nos aburrimos o nos cansamos, esta teoría también nos explica por qué bostezamos en público, a sabiendas de no dar muy buena impresión.
La teoría evolutiva –
Algunos creen que el contagioso bostezo de los humanos está relacionado con el instinto de los animales de mostrar sus dientes como muestra de intimidación y territorialidad. El psicólogo Dr. Robert Provine de la Universidad de Maryland, está totalmente en desacuerdo con la teoría fisiológica aunque no descarta ni la teoría de Boredom ni la teoría evolutiva. En sus pruebas, este experto descubrió que las personas no bostezaban a menos que se incrementara su oxígeno adicional.
La disminución del dióxido de carbono en el ambiente tampoco evitaba los bostezos. Para sus estudios, incluso grabó las bocas cerradas de sus pacientes. Todos ellos podían bostezar inmóviles pero se sentían insatisfechos aún cuando respiraban todo el oxígeno que necesitaban a través de su nariz. Así pues, no hay escasez de explicaciones en cuanto a por qué bostezar resulta contagioso. Pero mientras que la conclusión no sea definitiva, el bostezo parece predestinado a mantenerse bajo un halo de misterio."
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(si alguna imagen expuesta tiene copyrigth, nos informa y la quitaremos)
